24 sept 2009

Reseña de Ásono, por Claudio Asaád (un lujo!)

Reseña de “ásono”

de Rocío Paulizzi

for my own blowing hair, chapped face, and unbuttoned coat that I'm speechless:
I am living. I remember you.

Marie Howe


Primera persona y tercera sentadas frente al mismo espejo miran de reojo el manzano de frutos verdes mientras anochece sobre la ciudad.

Hay una casa. Un lugar donde Rocita Manzana vive, a veces, otras hace del vivir un vocabulario para que la incomodidad se revele; surja como esa parte de la vida sin nombre que se modifica y se sustituye minuto a minuto. Rocita tiene opciones, a veces, pero las usa como un filoso amuleto contra el vacío. Y de nuevo se ve obligada al lenguaje, a dar testimonio. Rocita, tiene una c, como la autora, que juega con el diminutivo, el color y su identidad; que se disfraza de niña bajo la mirada paterna, en la casa donde está sola, en la casa donde el amor se hace o se espera.

“ásono” es el primer libro de poemas de Rocío Paulizzi, una poeta de precisa armonía, que ofrece los objetos de su mundo como material de una lengua vital y serena.

El atropello es de los días, de los universos que se organizan en torno a las presencias cotidianas, esas que pierden su inhibición ante el contacto entre sí, cuando la poeta las predice, les revela su trayecto desde su lugar en el mundo, hasta el encuentro con el sentido profundo que las argumenta.

El libro, muestra dos momentos. El de la voz en primera persona de la poeta, que declara su intención de asomarse a ese riesgo: desubicar el contorno ajustado de los mundo próximos y destilar su sentido en el poema. En el segundo momento, la protagonista es la segunda persona.


Pero, se debe advertir:

Rocita, sin embargo no es rosa, un poco más allá es manzana (verde), fruto de un paraíso imposible, tentación y sabor ácido declinando la neutralidad de un bosque de ángulos precisos, ventanas que dan al cielo, vidrios laterales, lunas que se llenan, a veces, como el poema; esa aparición en la vida de Rocita creada, edificada con la pulpa nunca indulgente de las palabras. La geografía arquitectónica de los espacios muestra la vida de Rocita, un personaje lejos de la Alicia de Lewis Carroll, a distancia de la caída de Pizarnik sobre el vacío de la palabra, pero cercana a la idea de un doble que sin dominar el espacio del yo, derrumba la imposibilidad de la omnipresencia de la primera persona para movilizar, desde la alteridad, las pertenencias más hondas y adversas que la autora reconoce a pocos centímetros de su cuerpo, como lumbre secreta reveladora de superficies invisibles. Rocío narra a Rocita desde el interior de la propia mirada, la voz de la primera habla por lo que el ojo insistidor de la segunda ve. Las dos recuerdan. Rocita es quien asoma y regresa a dictarle a Rocío el trayecto de los significados. Ese cuerpo, el de una niña leyenda se une a la autora por el conducto del lenguaje, en su nombre y para siempre.

¿Dónde es la poesía? ¿En el poema, o en lo que deja después de pronunciarse? Rocío Paulizzi se mira escribir, beber, vivir y sentarse a esperar que la comida evapore el tiempo en la cocina. Vive y en los entredichos del silencio y las salidas de la escritura hace la poesía, la pule con el oficio y la obsesión de la búsqueda.

El título del libro ásono, agrega cierta gravedad a la operación poética que se prepara desde los primeros versos. Los sonidos se suman y crean una y otra vez, vestigios auditivos para unir las imágenes aparentemente dispersas en el poema:

rocita manzana

escribe canciones

sin música

sin dolor



pero

rocita manzana canta!

canta!

canta!

nació para cantar!

Como una caja de música, Rocío Paulizzi, Rocita manzana y el esqueleto del mundo son tres que cantan, que hacen caso omiso a los consejos de papá y con sutil trazo hacen de tinta y palabra una carnadura temblorosa, viva de la experiencia humana en la que poetizar es sólo el principio de ese recorrido que hacen las yemas de los dedos videntes sobre el abismo de la superficie.


Claudio Asaad




17 sept 2009

ya están impresos!!!!

Les presento la tapa de Ásono, tal como la diseñó María Reineri, con fotos de Emanuel Maurino (ambos integrantes del grupo literario El Grito)
graaaaaaaaaaaaciasssssss!

nos vem el sábad?

10 sept 2009

Presentación de Ásono ¿por qué habrá que hacer estas cosas sociales?

Bueno, finalmente existe ásono.. un librito hecho sin querer y logrado con la fuerza y el trabajo de muchas personas que me rodean.. (luego pasaré lista de todas ellas.. porque son muuuuuchas y me hacen sentir colmada de afecto y respeto)

Sí.. vengo mariconeando.. y qué?